TIPOGRAFÍA: ¿cuáles son las mejores para estudiar?

Buenas tardes, #unicompis y #opocompis. ¿Qué tal habéis pasado el #turnodemañana? Lo primero que quiero hacer, antes de empezar con el post de hoy, es pediros perdón por no subir dos posts a la semana. Estoy en plena época de finales y mi tiempo se reduce muchísimo: tengo exámenes, trabajos, prácticas, inglés, el programa de radio,... y además, ahora, quiero prepararme el Camino de Santiago así que tengo que buscarme tiempo para hacer deporte. A veces creo que intento hacer demasiado a la vez y que no me dejo tiempo para mi, pero bueno, seguro que cuando acabe los exámenes me alegro :)

El post de hoy, como os he ido adelantando en mis redes sociales, trata sobre cuáles son las mejores tipografías del ordenador a la hora de estudiar. Este tema es bastante importante para mi porque, no sé vosotras, pero yo necesito pasar mis apuntes de clase a limpio en el ordenador y trabajar a partir de ellos. Son esos los que subrayo, de los que hago esquemas,... Soy incapaz de hacerlo en los apuntes que tomo a mano en clase porque los encuentro demasiado sucios (aunque la mayoría piense que podría estudiar directamente de ahí de los bonitos que son).

La tipografía es muy importante porque, aunque parezca mentira, algunas nos ayudan a mantener la concentración más que otras.

Así que, sin más dilación,... ¡¡comenzamos!!

El primer requisito para elegir la tipografía es que debe ser muy fácil de leer. Podemos diferenciar dos tipos de letras: las serif y las sans-serif. La primera se caracteriza porque las letras tienen unos pequeños adornos (como, por ejemplo, Times New Roman) y las sans-serif no cuentan con esos adornos (como, por ejemplo, Arial o Calibri).

Consejos para estudiar (I)

¡Buenas tardes, #unicompis y #opocompis y bienvenidos un día más a mi blog. Hoy os traigo una sección en la que voy a ir explicando consejos que vienen bien a la hora de estudiar, como siempre desde mi experiencia (ya sabéis los que a unos les viene bien a otros les viene mal). Así que, sin más dilación… ¡¡empezamos!!

Selectividad (I): Mi experiencia

Buenas tardes, unicompis y opocompis. Esta mañana cuando iba camino de Sevilla en el autobús, me he puesto a pensar, ¿sobre qué escribo hoy? Y como he visto que muchas de mis seguidoras están en bachillerato y tienen a la vuelta de la esquina la temida (pero poco peligrosa) selectividad, he decidido hacer el primero de varios post sobre la PRUEBA DE ACCESO A LA UNIVERSIDAD. Aunque también está dirigido a aquellas personas que, como yo, ya han pasado esa época, podéis comparar mi experiencia con la vuestra y dar más consejos a los que se presentan ahora (que son consejos por los que hubiéramos casi matado en esa época). En este primer post os voy a hablar sobre mi experiencia en selectividad. Tomad asiento y prepararse para acompañarme en este viajecito por el pasado…

¿Por donde empezar? Yo quería estudiar un doble grado en Periodismo y Comunicación Audiovisual y la nota de corte de esa carrera estaba en un 11,200 y pico. No iba muy contenta porque mi nota de bachillerato no subía de un 8, tendría un 7,8-7,9; así que mis esperanzas por conseguir esa nota se desvanecieron por completo. Además, sentía que me merecía más nota porque muchísimos profesores me putearon y, aún sabiendo que necesitaba notas altas, me bajaron muchísimo.

Me apunté a una academia, allí me prepararon super bien. Me despertaba a las 6 de la mañana, iba a Sevilla a la academia, llegaba a las 4 de la tarde, almorzaba y dormía la siesta. Yo nunca he dormido siesta pero la verdad esos días la necesitaba. Cuando me despertaba a las 17:30 me duchaba para despejarme y me ponía a estudiar. Lo que hacía era repasar todo lo que había dado en la academia, con esquemas, resúmenes, conceptos claves,… y así durante 13 días de pura acción. Me llevaba estudiando hasta las 22:00, cenaba y seguía estudiando hasta medianoche que, como es normal, caía rendida en la cama.

La noche antes del primer examen dormí, para mi sorpresa, bastante bien. Os tengo que confesar que esa noche nada más meterme en la cama me lié a llorar como una niña chica. Los nervios podían conmigo pero, después de echarlo todo, conseguí dormir bien.

El primer examen que hice fue lengua, del que salí bastante contenta y en el que saqué un 9,6 (cuando en el instituto no subía nunca del 6,5). En inglés, como era de esperar, saqué un 9 (la verdad es que el examen era muuuy fácil). En filosofía cayó justo el autor que yo quería: Descartes y saqué un 8. En Economía fue la asignatura en la que menos nota saqué porque mi profesora no me había preparado bien, en la academia me recomendaron que me olvidara de estudiar la teoría y me centrase en los problemas para, así, al menos poder aprobar. Y aprobar, aprobé con un 6,75. Para subir nota hice geografía, que saqué un 8 y matemáticas, que tuve un 9,4. En total mi nota fue un 11,460.

Diréis ¡qué bien! ¡Consiguió entrar en la carrera! Pues no…mi nota no fue suficiente porque, al ser una carrera tan demandada y haber solo 20 plazas, la nota de corte no bajó del 12. Cuando me enteré de que no había entrado y de que ni siquiera iba a tener posibilidades de poder entrar lo pasé fatal, es una de las peores noches de mi vida que yo recuerdo. Aunque ahora, pasados los años, me alegro un montón porque estoy disfrutando muchísimo más de la carrera que si hubiera hecho el doble grado.

Mucho ánimo a las que empezáis ahora, pronto tendréis más posts sobre la selectividad.

HAUL MAQUILLAJE LOW COST

Buenas tardes, #unicompis y #opocompis y bienvenidas un día más a mi blog. Lo primero de todo, pediros perdón por no actualizar el blog ayer (estuve muy, muy liada), pero aquí os traigo un nuevo post recién salido del horno.  El jueves pasado os dije que hoy os enseñaría mi #unizulo: cómo lo ordeno, las cosas que tengo en él, lo que me gustaría cambiar,... pero estoy haciendo modificaciones y he pensado que lo mejor sería enseñároslo cuando esté completamente listo. Peeeero, no os preocupéis porque será muy prontito. Como os dije en el post de presentación aquí no solo íbamos a hablar de cosas relacionadas con los estudios sino que también podríais encontrar todo lo que me gusta, adoro, me apasiona. Y una de esas cosas es, sin duda, el maquillaje. Así que os traigo un haul de maquillaje super low cost. 

Así que... ¡¡empezamos!!

Método Pomodoro

¡Buenas tardes #unicompis y #opocompis y bienvenidos un día más a mi blog! Lo primero de todo muchísimas gracias por la acogida que ha tenido el blog, estoy súper contenta. Lo segundo, tal y como os prometí en el primer post, hoy íbamos a dedicar el día a hablar sobre el Método Pomodoro (Pomodoro Technique en inglés). He decidido hacer un post sobre este tema porque son muchas las personas que me preguntan en la cuenta de Instagram en qué consiste, así que pienso que puede ayudaros bastante.

Definición del Método Pomodoro

Como iréis notando, soy muy fan de dar definiciones de todo y aquí os dejo la del método: se trata de una técnica para la mejor administración del tiempo. Es muy efectiva para personas que, como yo, consiguen estar concentradas muy poco tiempo y la mañana o tarde de estudio se le pasa volando sin conseguir hacer nada.

¡¡Bienvenidos!!

Buenas tardes, #unicompis y #opocompis y bienvenidos al primer post (espero que sea el primero de muchos) de mi nuevo blog. Durante las últimas semanas os he dado un poco la tabarra por Instagram (@universitariaenapuros) con la llegada del blog y... ¡¡aquí lo tenéis!!, con un diseño súper minimalista, justo como a mí me gusta.

Voy a aprovechar este post para que me conozcáis un poquito más. Lo primero dejar claro que aquí vais a encontrar de todo lo que me gusta: cine, moda, maquillaje, fotografía, series, cuquipapelería,... todo ello me APASIONA. 

Estudio Comunicación Audiovisual en la Universidad de Sevilla, una carrera que adoro y que estoy disfrutando al 100%. Como vivo en un pueblo a 30 kilómetros de la capital sigo en casa con mis padres y con mi hermana.