lunes, 12 de septiembre de 2016

¿Cómo superar la VUELTA A LA RUTINA en cuatro pasos?

¡Hola, chicas! Hoy es lunes, comienzo de una nueva semana y ya solo queda una para que comience de nuevo las clases y volver a la rutina. Ay, rutina, en realidad echo de menos ir todos los días a clase, tomar apuntes,... Llamadme loca si queréis pero es verdad. Sin embargo el hecho de que espere con ansia que empiecen las clases no quiere decir que, como ser humano que soy, no me cueste trabajo adaptarme de nuevo a la rutina

En mi caso solo he tenido dos semanas de vacaciones al 100% desde que he terminado la recuperación hasta que me toca empezar de nuevo las clases y mi cuerpo ha perdido todos los hábitos que tenía. Así que, para que sea todo más cómodo y el cuerpo no sufra tanto con la vuelta a la realidad, os voy a enseñar cómo adaptarse a ella poquito a poco. Son cuatro pasos que yo sigo todos los años y con los que me va muy bien.

¡¡Comenzamos!!


1. Recuperar nuestro horario de sueño

Durante el curso me tengo que despertar todos los días a las 06:15 de la mañana para ir a clase. Muy temprano. Lo sé. Lo sufro. Normalmente, si no me pongo alarma para despertarme, durante las vacaciones me despierto a las 11:00 aproximadamente. Sé que hay mucha gente que se despierta mucho más tarde en vacaciones pero, aun así, pasar de un día despertarnos a las 11:00 a otro despertarnos a las 06:15 sería un cambio muy brusco que a nuestro cuerpo le pasaría factura.

¿Qué hago yo para que el lunes por la mañana cuando suene la alarma a las 06:15 no me cueste tanto levantarme? Desde una semana antes voy adaptando poco a poco la hora a la que me levanto:
   - lunes y martes me despierto a las 09:30
   - miércoles y jueves me despierto a las 09:00
   - viernes y sábado me despierto a las 08:30
   - y el domingo me despierto a las 08:00

Todo esto lo acompaño con un cambio de horario en el que me voy a la cama. Normalmente me pueden dar las dos de la mañana viendo series y películas antes de irme a dormir pero en mi semana de adaptación a la rutina...empieza a cambiar. A la medida que avanzan los días me voy acostando más temprano, en parte obligada y en parte porque el cuerpo, al ir levantándose más temprano, me lo va pidiendo. 



2. Recuperar nuestros hábitos alimenticios

Durante el verano y, en definitiva, cuando no tenemos una rutina fija los horarios de las comidas se nos van por las nubes: comemos lo que se nos apetece cuando se nos apetece (¡yo he llegado a almorzar a las cuatro de la tarde!). Todo esto se traduce en una cosa que no nos gusta: kilos de más. Así que, para volver bien a la rutina, es bueno volver a recuperar nuestro horario de comida y seguir una dieta sana. No hay por qué hacer una dieta para adelgazar, simplemente seguir una dieta equilibrada. En mi caso, yo durante la semana intento no tomar pizza, patatas fritas, dulces,... Es durante un día del finde cuando me permito "ese tipo de lujos".

Cuando volvemos a la rutina nos gusta proponernos metas y objetivos a cumplir. Con respecto a este tema yo os propongo dos: empezar a hacer deporte (poquito a poco, yo os recomiendo la rutina de ejercicio de Patry Jordan, disponible en su canal de YouTube) y beber todos los días tres litros de agua. ¿Os animáis?


3. Recuperar nuestro hábito de estudio

No te confundas, no pienses que te voy a pedir que te pongas a estudiar sin haber empezado las clases. Simplemente tenemos que tratar de dedicar una o dos horas del día a ejercicios que exijan concentración y que activen nuestra mente para que, así, cuando nos pongamos a estudiar de nuevo no nos resulte tan pesado. Os doy algunas ideas, podéis dedicar la hora de la siesta (de 16:00 a 17:30) a leer un libro, estar leyendo sin parar para coger el móvil, haciendo algunos sudokos o jugando a juegos de memoria. Durante esa hora y media nuestra mente va a estar activa y vamos a conseguir estar listas para que cuando tengamos que coger los libros nuestro cerebro ya esté preparado.



4. Buscarle el lado positivo

Siempre que tenemos que hacer algo que no nos gusta o que no se nos apetece especialmente, tenemos que buscarle el lado positivo. Para mi la positividad es esencial en mi vida. Si no pensamos que las cosas vayan a salir bien, nunca saldrán bien. Tenemos que pensar en todas las cosas buenas que trae consigo el volver a la rutina: reencontrarnos con compañeros, comprar material escolar, que empieza el otoño, que la Navidad está a la vuelta de la esquina, que vamos a conseguir todo lo que nos propongamos,... En definitiva, tenemos que derrotar a la rutina.



Y esto ha sido todo por hoy, espero que os haya gustado y que estos consejos os sirvan para la vuelta a la rutina. No os olvidéis de seguirme en mis redes sociales (IG: @universitariaenapuros; SC: unienapuros) y si queréis poneros en contacto conmigo siempre podéis enviarme un correo a comunicadoraincomunicada@gmail.com.

¡Nos vemos el miércoles! ¡Muaaaaack!


<3.

No hay comentarios:

Publicar un comentario